Por: La Redacción.
Ciudad de México., a 8 de julio del 2024.- Con una asamblea nacional realizada a puerta cerrada y el voto a mano alzada de 3 mil 200 priístas, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) aprobó los cambios a sus estatutos que impedían la relección de su dirigente nacional, Alejandro Moreno Cárdenas, y le dejaron abierta la posibilidad de mantenerse otros ocho años en el cargo.
Bastó una hora con 53 minutos para que fueran avaladas también modificaciones a su programa de acción, a su código de ética y a sus declaración de principios, en las que definieron al partido como “demócrata social”, así como de centroizquierda progresista. Además, se estableció que este partido “se opone al neoliberalismo”, y a las políticas de ese modelo que “generaron pobreza, violencia y desigualdad social”.
No hubo discusión de las modificaciones de sus estatutos, las cuales no fueron detalladas en la sesión, ni voces disidentes dentro del Pepsi Center, donde se desarrolló la asamblea nacional.
El estricto control de acceso, sólo para los delegados que acudieron a los foros estatales, generó la molestia de militantes a los que se les impidió el paso.
Uno de los inconformes rompió una de las puertas de cristal del centro de espectáculos, y entre los jaloneos, un grupo dio portazo para “colarse” a la sesión. Enseguida, el acceso se cerró, lo que dejó fuera a muchos de los delegados que ya estaban registrados. Fue hasta que se avalaron los dictámenes cuando se les permitió ingresar.
De esta forma, el tricolor concretó la mayor modificación a sus normas en las últimas décadas.
En sus documentos internos argumenta que su sustento ideológico parte de los principios de la Revolución mexicana, pero desde ayer quedó fuera el de la “no relección”, que fundamentó el inicio del movimiento revolucionario.
Pese al hermetismo con el que en días previos se dio la organización de la reunión, de la que de manera pública no hubo invitación, al lugar llegaron zanqueros, que al ritmo de batucada dieron la bienvenida a los asistentes.
Al arranque de la que fue la 24 asamblea nacional ordinaria de esta fuerza política, se justificó el contenido de los dictámenes, aunque no aclararon los cambios estatutarios. Sólo se informó a los asistentes que en su invitación se incluía un código QR para consultar el documento completo y se dio lectura al número de artículo e inciso que se cambiaría.
Moreno Cárdenas pidió excusarse al momento de las votaciones por “motivos personales”, tras lo cual, dejó por unos minutos el estrado.
El partido difundió la asamblea con una transmisión en sus cuentas oficiales de redes sociales. Al momento de la aprobación, la cámara mostró la mano alzada de la mayoría de los presentes. Cuanto se preguntó quienes se oponían, sólo se enfocó el estrado. Inmediatamente se reincorporó a la mesa principal Moreno Cárdenas, ante las constantes porras de “Alito, Alito”, alentadas desde la mesa principal.
Los cambios permitirán al dirigente nacional y a los estatales mantenerse por tres periodos consecutivos, cada uno de cuatro años. También, da al presidente del Comité Ejecutivo Nacional la facultad de designar y remover a los coordinadores parlamentarios en las Cámaras del Congreso de la Unión, y reduce casi a la mitad al consejo político del partido, órgano que debe ratificar muchas de las acciones del instituto.
El coordinador de la bancada del tricolor en San Lázaro, Rubén Moreira, fue el encargado de leer los cambios de la declaración de principios del instituto político. “Siendo autocríticos del pasado, expulsemos del ideario al neoliberalismo, así como a las políticas de ese modelo, generadoras de pobreza, violencia y desigualdad social. Políticas que nos distanciaron de grandes grupos de la población. Pongo un ejemplo: con las maestras y con los maestros de México a los cuales les tendemos la mano para un renacer de una alianza popular”, indicó el diputado federal.
Las modificaciones a los documentos se aprobaron por mayoría de los delegados, lo que incluye el planteamiento expresado por Moreira para que en los próximos meses se inicie “una amplia discusión. Hay que escuchar a los militantes, dirigencias, simpatizantes”, a quienes no están cerca de nuestras propuestas y a los expertos y analistas “para resolver las contradicciones, tensiones del PRI y de México”.
Se deberá resolver “cómo organizarnos, quiénes son militantes y cuáles compromisos se asumen” con esta categoría.
Luego, señaló Moreira, habrá de realizarse una nueva asamblea extraordinaria, en la que la militancia decida el nuevo rumbo del partido.
La diputada Marcela Guerra presentó el dictamen final sobre el programa de acción, mediante el cual se acordó impulsar la nueva etapa priísta y “dejar atrás el referente programático” aprobado en la asamblea de 2017.
Por la tarde, las reacciones a las modificaciones aprobadas no se hicieron esperar. Pedro Ángel Contreras, ex funcionario estatal de Sonora y quien aspiró a la candidatura a la gubernatura de ese estado, presentó su renuncia y criticó la concentración de facultades que ha acumulado el dirigente nacional.