Por: Sandra Dueñes Monárrez.
Guadalupe y Calvo, Chih., a 3 de septiembre del 2024.- Organizaciones defensoras de los derechos humanos reconocieron la labor que en estos momentos se encuentran realizando los tres órdenes de Gobierno en las comunidades serranas del municipio de Guadalupe y Calvo, esto luego de la denuncia pública que se realizó donde se advirtió que grupos armados habían desplazado a familias de comunidades de esa región del estado.
Sin embargo, desmintieron lo expresado por Gobierno del Estado quien a través de un comunicado de prensa titulado “Atención coordinada de los tres órdenes de Gobierno” aseguraron que “al realizan la entrega de apoyos en alimentos, medicamentos y asesoría jurídica para los habitantes de Cinco Llagas, y Baborigame, en el municipio de Guadalupe y Calvo, en donde hasta el momento no se registra ninguna persona por desplazamiento forzoso”.
En este mismo comunicado, se indica que la Fiscalía de Distrito Zona Sur ha entrevistado a los afectados de “supuestos desplazamientos” y que, aseguran, no han determinado ningún caso de este delito, las organizaciones civiles que se encuentran al tanto del caso y han acompañado a las comunidades afectadas, reconocieron que “existen acciones realizadas por parte de diversas instancias públicas”.
Sin embargo, el pasado lunes 2 de septiembre por la mañana salieron, para salvaguardar su vida y seguridad, por tierra 20 vehículos con alrededor de 100 personas, y por la noche del mismo día salieron rumbo a Baborigame otras personas. El día 3 de septiembre gracias a la insistencia de parte de la familia que aún está en Cinco Llagas lograron rescatar el cuerpo del joven Francisco V. B., después de 7 días de asesinado, el cual sepultaron en Cinco Llagas.
En este contexto, la organización defensora de los derechos humanos Contec relató que son alrededor de 200 personas indígenas las que continúan en Cinco Llagas esperando que resuelvan la fecha del traslado a Baborigame ya que tienen mucho temor.
Las familias indígenas y mestizas huyen de sus territorios por miedo y por el peligro que corren sus familias. Están perdiendo sus vidas, su patrimonio, su ganado y sus cosechas, e incluso, sus casas han sido saqueadas, relató Contec.
Desde hace tres años se han registrado decenas de familias que huyen de sus comunidades y se van para Baborigame, para Guadalupe y Calvo o para alguna ciudad. En el caso de las familias que huyen a Baborigame, las familias viven hacinadas y con dificultades económicas, pues permanecen en una sola vivienda 10, 15 y hasta 24 personas.
Ellas han perdido sus siembras, pues, aunque hay quienes pueden dar vueltas a sus comunidades, no pudieron sembrar por miedo, puesto que el territorio está plagado de sicarios que amenazan sus vidas. Estas personas no reciben ningún apoyo, ni atención como víctimas y, si no han interpuesto denuncias, es por el temor a que los criminales tomen represalias en su contra o contra sus familias.
Por ese motivo, las organizaciones civiles que acompañan a las familias desplazadas solicitan a las autoridades de los tres ordenes de gobierno se otorgue atención humanitaria, así como la instalación permanente de una base militar para proteger a las personas que quieren permanecer en sus comunidades.
Además que se traslade a las personas que por el temor de perder su vida quieren salir del lugar y se garantice la atención en el desplazamiento y la ayuda humanitaria. En este sentido, se busca hacer un llamado a las autoridades federales, estatales y municipales a implementar estrategias efectivas para la protección de la vida y la permanencia en el territorio de las comunidades de la seccional de Baborigame.