El sarampión es una de las enfermedades más contagiosas y una de las principales causas de muerte entre niños, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), aunque se puede adquirir en cualquier edad, incluso en la vida adulta si una persona no la padeció en la infancia.
Esta semana, la Secretaría de Salud federal emitió una alerta epidemiológica, luego de que se registraron varios casos de sarampión o rubeola en diversos países, entre ellos México, haciendo un llamado a implementar medidas para evitar un incremento en los contagios.
De acuerdo con el aviso de la Secretaría de Salud, el Sistema de Vigilancia Epidemiológico de Enfermedad Febril Exantemática ha registrado 416 casos probables de sarampión o rubéola en México, en lo que va del 2025, al corte del 8 de marzo,
De estos, 22 fueron confirmados por laboratorio como sarampión, lo que representa un incremento significativo en comparación con el mismo periodo de 2024, cuando solo se reportaron siete casos confirmados.
Detalló que de los casos confirmados, dos fueron importados y 20 asociados a la importación, es decir, estos últimos formaron parte de una cadena de transmisión local, originado por un caso importado.
Sarampión en Perú. Minsa confirma dos casos, y 34 en investigación.
Del total, 18 casos se registraron en Chihuahua y cuatro más en Oaxaca, de los cuales 15 son hombres y siete mujeres, quienes tienen un resultado RT-PCR positivo por parte de los LESP y el InDRE.
Por grupo etario, el mayormente afectado son personas de cinco a nueve años, con 11 casos; pacientes de 10 a 14 años, con cuatro; de de 25 a 44 años, con cuatro; de 15 a 19 años, con dos; y finalmente de 1 a 4 años, con un caso.
El sarampión es una enfermedad viral que puede prevenirse a través de la vacunación, sobre todo teniendo coberturas altas entre la población.
El grupo más susceptible de adquirir esta enfermedad es el de los niños pequeños y las mujeres embarazadas que no han sido vacunados.
Los síntomas del sarampión cambian conforme se desarrolla la enfermedad y algunos de ellos son:
- Fiebre alta que dura entre 4 y 7 días, y se presenta después de 10 o 12 días de estar en contacto con el virus.
- Congestión nasal.
- Tos.
- Ojos rojos y con secreciones.
- Manchas blancas en la parte interior de las mejillas.
- Posteriormente se produce una erupción rojiza en la piel que dura de 5 a 6 días.
La erupción rojiza inicia en la cara y parte superior del cuello, se extiende hasta cubrir el cuerpo en un periodo aproximado de 3 días y luego desaparece.
El sarampión puede tener complicaciones graves, incluso ser mortal. Algunas de las complicaciones son neumonía, encefalitis, diarrea grave e infecciones del oído y respiratorias.
¿Cuál es su tratamiento?
No existe un tratamiento antiviral específico para el sarampión. Sin embargo, para evitar complicaciones graves la atención incluye una nutrición adecuada, la ingesta de líquidos, el tratamiento de los cuadros de deshidratación, la prescripción de antibióticos en caso de ser necesarios (por infecciones de ojos, oídos o neumonía) y la suplementación de vitamina A. Este último, con un comprobado efecto para reducir la mortalidad.
¿Cómo prevenir el sarampión?
La vacunación y la vigilancia epidemiológica son dos de las principales herramientas para prevenir el sarampión.
La vacunación es segura, eficaz y económica. El esquema para la vacuna triple viral (SRP) que protege contra sarampión, rubeola y parotiditis, indica la aplicación dos dosis: la primera a los 12 meses cumplidos y un refuerzo a los 6 años.
Los adolescentes y adultos que no cuentan con las dos dosis de la vacuna SRP pueden recibir la vacuna contra sarampión y rubeola (SR)