Por: La Redacción.
Ciudad de México., a 7 de junio del 2025.- La Organización de Estados Americanos (OEA) publicó este viernes su informe preliminar sobre las elecciones al Poder Judicial que se realizaron en México el pasado 1 de junio.
En él, expresa su preocupación por la baja tasa de participación, así como por la posibilidad de que los jueces elegidos carezcan de “autonomía e independencia”.
En términos generales, la organización no recomienda replicar una elección de este tipo en otros países.
En el informe, la OEA, que desplegó para este proceso a una Misión de 16 personas de 10 nacionalidades, encabezadas por el excanciller de Chile, Heraldo Muñoz Valenzuela, subrayó que el proceso electoral del domingo pasado en México fue “sumamente complejo y polarizante” y que un análisis del mismo evidencia la necesidad de “múltiples oportunidades de mejora”.
La misión expresó su “preocupación por el bajo nivel de participación de la ciudadanía. De acuerdo con los datos disponibles al momento de la elaboración de este informe, la participación para la elección fue de aproximadamente 13%1; se trata de uno de los niveles más bajos de participación en la región para un proceso electoral. Asimismo, se registró un alto porcentaje de votos nulos y no marcados”.
En ese sentido, la Misión comparó la jornada con las elecciones de 2024, en las que votó 60.9% de los electores mexicanos. “La Misión considera necesaria una reflexión integral respecto a la naturaleza de este proceso y la forma en que ha sido llevado adelante, a la luz de que más del 85% del electorado no ha mostrado interés en participar”.
Recordó que el proceso para esta elección “se llevó a cabo en un plazo muy breve y en un contexto político complejo, caracterizado por una fuerte polarización y un alto nivel de litigiosidad”.
Candidatos con más votos fueron promovidos en «acordeones»: OEA; ve «dudas razonables» sobre autonomía de jueces
La Misión también subrayó que “las nueve candidaturas con mayor cantidad de votos a la Suprema Corte fueron promovidas en «acordeones» físicos y virtuales”.
Además, constató que “seis de los nueve ministros (as) fueron postulados por el comité del Poder Ejecutivo y las tres restantes son integrantes de la corte actual nombradas por el expresidente, lo cual levanta dudas razonables sobre la autonomía e independencia del máximo tribunal con respecto al Ejecutivo”.
El informe no menciona que haya alguna evidencia de fraude y de posible vinculación del crimen organizado.
Agregó que el derecho internacional no establece ningún procedimiento específico de selección de jueces y juezas. No obstante, los instrumentos internacionales sí definen estándares, principios y buenas prácticas que deben seguirse en esta materia.
Dijo que en la elección judicial en México “no hay garantías de que quienes resulten electos/as tengan la solvencia técnica, la idoneidad y las capacidades específicas que los cargos que asumirán requieren.
“Ello resulta preocupante a la luz de los estándares internacionales y las buenas prácticas en la materia. En este sentido, la Misión recuerda que la Corte Interamericana de Derechos Humanos ha establecido que cualquiera que sea el mecanismo para la elección de jueces y juezas, éste debe garantizar que sean evaluados debidamente las condiciones de idoneidad y méritos para el cargo.
Por su parte, el Comité de Derechos Humanos de la ONU se ha referido en varias ocasiones a los criterios de nombramiento de jueces y juezas, y ha establecido que el principal debe ser la idoneidad de los candidatos y las candidatas.
En cambio, hace un llamado a la ciudadanía e instituciones mexicanas a evaluar “si el modelo actual de selección de autoridades judiciales a través del voto popular, que no tiene precedentes a nivel mundial, contribuye a fortalecer los principios fundamentales de la administración de justicia; o si, por el contrario, acaba debilitando la transparencia, imparcialidad, eficacia e independencia del Poder Judicial”.
Resalta la importancia “de que toda reforma al modelo de selección de jueces se haga de manera gradual, a partir de un debate verdaderamente plural y, sobre todo, con base en un diagnóstico comprensivo, técnico y profesional sobre las problemáticas que se busca resolver y los mecanismos más efectivos para hacerlo”.
Y concluye con este señalamiento: “la Misión no recomienda que este modelo de selección de jueces se replique para otros países de la región”.
Con información de El Universal.