Eduardo “N”, el principal sospechoso, ya había cometido crímenes anteriormente, pero había quedado en libertad
Por
Anayeli Tapia Sandoval
El asesinato de Astrid Cruz, de 37 años, y su hijo Fernando, de 16, ha generado una gran indignación en Jalisco, y México en general. El crimen, ocurrido el pasado 3 de marzo en Zapopan, tiene como principal sospechoso a Eduardo “N”, expareja de la víctima, quien se encuentra prófugo.
Las autoridades han confirmado que Eduardo “N” ya había sido condenado por feminicidio en 2015, tras asesinar a su entonces pareja en 2004. A pesar de su historial, obtuvo su libertad en 2020, y cinco años después, Astrid y su hijo fueron asesinados de la misma forma que su primera víctima: golpeados con un martillo.
¿Cómo ocurrió el crimen?
Días antes del ataque, Astrid recibió mensajes amenazantes de Eduardo “N”. En uno de ellos, él aseguraba que se iba a Cancún con un amigo y que se llevaría a los niños con él. También dijo que iba a “destruir ese chip”, lo que sugiere que planeaba cortar la comunicación con ella.
Otro mensaje enviado por correo electrónico indicaba que sabía a dónde se iba a mudar Astrid, lo que ha hecho sospechar a las autoridades que el crimen pudo haber sido planeado con antelación.
Fue el pasado lunes cuando Astrid y sus dos hijos fueron atacados dentro de su propia casa en el fraccionamiento Capital Norte, en Zapopan, Jalisco. Según la Fiscalía General del Estado (FGE) de Jalisco, el agresor ingresó a la vivienda y golpeó brutalmente a Astrid y Fernando con un martillo, provocándoles la muerte.
Su hija menor, de 10 años, también fue atacada y se encuentra hospitalizada en estado grave. Se sabe que tras la agresión, el presunto responsable maniató los cuerpos e intentó deshacerse de ellos, pero al parecer no tuvo tiempo y huyó del lugar.
Amigas de Astrid sospecharon que algo no estaba bien cuando recibieron mensajes extraños desde su celular. De acuerdo con la información, Eduardo “N” utilizó el celular de su víctima con la intención de hacerles creer que ella seguía con vida después del ataque.
Sin embargo, las amigas de Astrid notaron irregularidades en la manera en que estaban escritos los mensajes y de inmediato sospecharon que algo no estaba bien. Al percatarse de esto, decidieron ir a su casa, donde encontraron los cuerpos con signos de violencia.
Ya había cometido otro feminicidio
La historia criminal de Eduardo “N” ha causado indignación, ya que no es la primera vez que asesina a una pareja. En 2004, el sujeto fue acusado de haber asesinado a Martha Berenice, su pareja de aquel entonces, en Culiacán, Sinaloa. El hombre la golpeó con un martillo en su domicilio de la colonia Las Quintas y luego abandonó el cuerpo en el río Tamazula.
Eduardo «N» se encuentra prófugo de la justicia. No es la primera vez que es acusado por asesinato/feminicidio. (X/@Jnlomeli)
Para desviar sospechas, se unió a la familia de Martha en la búsqueda de la joven durante cinco días, hasta que las autoridades notaron contradicciones en su declaración. Al ser confrontado, confesó el crimen y llevó a la policía hasta el sitio donde había dejado el cadáver.
Fue detenido el 23 de marzo de 2004 y procesado. Sin embargo, en 2006, logró fugarse con la ayuda de una secretaria de juzgado, un taxista y un instalador de pisos. Permaneció prófugo hasta que fue recapturado en Guadalajara.
En 2015, fue declarado culpable y condenado a 24 años, 9 meses y 18 días de prisión. No obstante, solo cumplió 16 años de la sentencia y obtuvo su libertad en 2020.
Mientras cumplía su condena en prisión, Eduardo N conoció a otra mujer con quien se casó y tuvo una hija. En 2022, su esposa murió en circunstancias que nunca fueron esclarecidas.
Aunque su muerte no se investigó como feminicidio, la familia de Astrid y colectivos feministas han pedido a las autoridades revisar este caso, ya que creen que Eduardo N pudo estar involucrado.
Autoridades rastrean su paradero
Tras el feminicidio de Astrid y el asesinato de su hijo Fernando, Eduardo “N” se dio a la fuga. Las autoridades han recibido informes de que podría estar en Ciudad de México o en Culiacán.
El gobernador de Jalisco, Pablo Lemus, aseguró que se está colaborando con otras fiscalías para localizarlo: “Es un delincuente, lo tenemos que capturar. Este multihomicidio es algo verdaderamente indignante y ya estamos muy cerca de dar con él. Los registros nos indican que está fuera de Jalisco”, dijo.
En redes sociales circuló la versión de que Eduardo “N” había trabajado como asesor en seguridad para el gobierno de Jalisco, pero Lemus desmintió esa información. Sin embargo, se confirmó que el hombre era fundador de la empresa Grapesa International, dedicada a la asesoría en seguridad y que, tras salir de prisión, se convirtió en presidente de la organización Mexicanos Uniformados, que aboga por los derechos del personal de seguridad.
Pedirán justicia por Astrid y Fernando este 8M
El caso ha generado indignación y protestas, especialmente en Jalisco, donde organizaciones feministas han denunciado la falta de justicia y la reincidencia del feminicida.
Colectivos han convocado a una marcha el próximo 8 de marzo, en el marco del Día Internacional de la Mujer, para exigir justicia por Astrid, Fernando y todas las víctimas de feminicidio en México. La cita es en el Parque Rojo, a las 15:30 horas. Se ha pedido que los asistentes vistan de blanco, mientras que los hombres que quieran participar pueden llevar un distintivo morado.
El feminicidio de Astrid y el asesinato de su hijo han reavivado el debate sobre la impunidad en México.
Según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en 2024 se registraron 733 feminicidios en México entre enero y noviembre. Sin embargo, organizaciones como el Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio señalan que muchas muertes violentas de mujeres no se investigan como feminicidio, por lo que las cifras podrían ser el doble.
En los últimos cuatro años, más de 15 mil mujeres han sido asesinadas de manera violenta en el país.
La familia de Astrid ha solicitado que se unan los tres casos de feminicidio en los que Eduardo “N” podría estar involucrado para fortalecer el proceso legal y evitar que vuelva a quedar en libertad.
Karla, hermana de Astrid, expresó a TV Azteca su temor de que el agresor nunca debió haber salido de prisión.“Por favor, no se olviden de nosotros. Esto es una injusticia, una pesadilla que nadie debería vivir. No paren hasta que este hombre reciba su merecido”, declaró.